Comienzo por confesar que soy fan de LEGO. Así que no sé si sabré ser del todo objetiva.

Hace unos días leí que LEGO, por segunda vez que yo recuerde, intenta acercarse al mundo de las niñas. Lo que significa que sus estudios de mercado le confirman que los universos LEGO actuales atraen mucho más al sexo masculino que al femenino.

La primera vez que  LEGO intentó atraer a las niñas fue en los años 90, con la gama Belville. Ahora vuelve a intentarlo con Lego Friends, una nueva colección que será lanzada próximamente (2012). En las dos ocasiones, los colores rosas y lilas aplicados a los ladrillos y las cajas, han sido su primera apuesta. La segunda, los escenarios que recrea: caballos, animales de compañía, casas casi palacios, etc. Esta vez, las casas, siendo preciosas, nos recuerdan más al mundo LEGO tradicional que las casas de princesas de Belville; además añade un café, un salón de belleza, un clínica veterinaria y una cabaña en los árboles.  Sin embargo, la principal diferencia entre una y otra colección es que Friends son cinco amigas con unas características propias que continúan ahondando en el universo femenino: tenemos a la amante de los animales, la inteligente del grupo, la estilista, la que le gusta la fiesta y una “single”. Este último concepto, sinceramente no sé cómo tomármelo.

Comienzo por presentar mis respetos a LEGO y reconocer y agradecer su preocupación por interesar a las niñas en el mundo de las construcciones, con todas las posibilidades lúdicas y de aprendizaje que este tipo de juego conlleva. Me parece un interés legítimo y muy positivo, aunque encierre también su interés por ganar cuota de mercado, ¡porque no¡

Entiendo y comparto con LEGO que para llamar la atención de las niñas debemos proponerles aquello que les gusta y que perciben como apropiado y deseable a su género. En este sentido, esta nueva apuesta presenta a mi modo de ver tres evoluciones a remarcar:

– los ladrillos: menos glamurosos y más próximos a la construcción clásica.

– los escenarios: en donde aunque tímidamente aparecen  profesiones actuales.

– las muñecas: con sus características diferenciales.

Todo ello es sin duda una manera de avanzar. Pero me pregunto si es posible atraer a las niñas sin ahondar todavía más en los estereotipos de género que sabemos, reducen enormemente el imaginario de las niñas. Sin renunciar a los colores característicamente femeninos, ni a una serie de escenarios identificados como propios: salones de belleza, clínicas veterinarias, etc. y, dado que el sexo masculino cada vez se interesa más por la moda y la estética ¿no podríamos proponer escenarios más permeables?

Quizás, el verdadero reto para LEGO fuera imaginar cómo hacer para que las niñas se sientan atraídas por sus otros escenarios  más tradicionales y también cotidianos para las niñas: ¿aeropuertos recreando las pistas pero también las tiendas, restaurantes, etc.? ¿Bomberos que rescatan personas y animales en riesgo? ,…. Quizá, esta  sería una manera de evolucionar,  acercarse a la realidad social y promoverla.

En este sentido, propondría a LEGO que se fijara en Playmobil,  no sólo para conseguir su misma cuota de mercado femenino (el 35% de sus clientes son niñas), sino para observar en profundidad porque sus escenarios resultan atractivos para ambos sexos. Pero otro día hablaremos de Playmobil.

Sin duda reconozco el esfuerzo de LEGO para conectar con los intereses y tendencias de los niños  en cada momento. Hace un año se estrenó con éxito en el mundo de los juegos de mesa, mostrando su capacidad de innovación, y este año lo hace en el universo de las peonzas siguiendo los pasos de Bayblade, de Hasbro.

Espero que LEGO consiga atraer cada vez más y mejor  a las niñas con propuestas cada vez más en sintonía con la igualdad de oportunidades, más allá de las campañas de comunicación.

Más detalles de LEGO FRIENDS aquí, aquí y aquí (los tres en inglés).