Escribir la carta a los Reyes, no es una actividad cualquiera. Requiere mucha atención e incluso una cierta estrategia, sobre todo si queremos que los Reyes sean generosos con nosotros. Ayudar a escribir la carta a nuestros hijos es sin duda uno de los placeres de las fechas navideñas. No lo dejéis escapar…

Hoy comparto con vosotros algunos trucos, que os aseguro que no fallan!!

Antes de empezar a escribir la carta, será de ayuda, charlar con los hijos sobre la figura de los tres Reyes de Oriente -explicar la historia como si fuera un cuento-, haciéndoles dar cuenta de que en una sola noche los Reyes deben llegar a las casas de todos los niños del mundo. ¡Esto sí que es magia! Es natural pues que los Reyes no siempre puedan llevar todo lo que les pedimos y que alguna vez se confundan … , pero como nos conocen y quieren, seguro que lo que escogen para nosotros, lo hacen con mucha ilusión y con muchas ganas de sorprendernos y de que nos guste .

Para no olvidar ninguna ilusión, vale la pena apuntar todo lo que nos gusta y deseamos en una libreta. No pasa nada si la lista es muy larga, lo único es que después tendremos más trabajo para elegir. Sin embargo, seguro que no olvidamos nada importante. Piensa que a menudo con tanta publicidad, acabamos pidiendo cosas de última hora y descuidamos otras que hacía tiempo que imaginábamos pedirlas. Seguro que os ha pasado más de una vez.

Ahora sí, llegan los trucos: A los Reyes les gusta las cartas no demasiado largas, porque si ven demasiadas cosas se agobian (¡que ya tienen una edad!), así que vale la pena elegir bien!

1. Empezamos pidiendo aquellos juguetes o aquellas cosas que más deseamos, no sea que los Reyes se cansen de leer y no lleguen a lo que más ilusión nos hace.

2. Si les explicamos con detalle porque lo que les pedimos, nos hace tanta ilusión, casi seguro que nos lo traen. A los Reyes les gusta mucho saber de nosotros y comprender nuestros gustos, sueños y secretos!

3. Cuando lo que pedimos es algo «muy grande» o de mucho valor, un truco es que todos los miembros de la familia lo pidan. Por ejemplo, si nuestro hijo mayor pide una bici y todos en nuestras cartas pedimos una bici para él, es casi seguro que se la traen.

4. Este tipo de pactos facilitan los acuerdos entre los hermanos, pues fácilmente se pondrán de acuerdo en pedir cosas los unos por los otros, y rápidamente el número de deseos para uno mismo disminuyen y se comparten con los deseos de los demás.

5. A los Reyes les encanta las cartas escritas a puño y letra por los niños y si llevan dibujos, aún más. Y a nuestros hijos les hará sentirse partícipes, protagonistas y responsables, porque estará hecha por ellos.

6. Nosotros podemos ayudarles mostrándoles como se redacta una carta (encabezamiento, fecha, despedida …) y cuidando la ortografía y con la mejor letra que tengamos … Los Reyes valoran las cartas bien escritas.

7. También les gusta que les preguntemos cosas y nos interesemos por ellos.

8. Motivar a nuestros hijos a pedir otras cosas que no sean sólo juguetes para ellos. Pueden ser cosas para la familia o incluso para otros niños y niñas que viven situaciones o en lugares complicados para que los Reyes lleguen hasta allí. De este modo, la carta a los reyes se convierte en un excelente momento de empatía que nos lleva a educar en la generosidad.

9. Si nosotros como padres también hacemos nuestra carta, seremos para ellos un buen modelo, ya que comprobarán que tampoco pedimos muchas cosas y nos conformamos con lo que finalmente nos traen los Reyes.

Y por último …. ¿Sabéis que a veces los Reyes dejan en las casas cartas dirigidas a toda la familia , principalmente a los niños, donde les explican cosas, los felicitan por todo lo que han crecido y aprendido y plantean retos para el año que empiezan? ¿No lo sabíais? Pues, tal vez este año tenéis suerte y os dejan una en vuestra casa …
¡Ah! ¡Y no os olvidéis de darles la carta!